La vegetación en los edificios se está consolidando como una forma interesante y sostenible de mejorar la calidad de vida en los entornos urbanos.
Entre los beneficios relacionados con los sistemas de vegetación para edificios, como el ahorro de energía, el apoyo a la biodiversidad y el control de aguas pluviales, también hay el recurso de aislante acústico.

Según algunos estudios sobre este misma capacidad se puede distinguir que los muros vegetales tienen un potencial significativo como herramienta de aislamiento acústico en los edificios y que según avanzan los años, la eficiencia del sellado de las juntas y el propio diseño han hecho mejorar de forma considerable estos tipos de instalaciones.

De este modo en la actualidad para que integremos de forma correcta el concepto de urbanización sostenible, hay que reducir las deficiencias en ruido, contaminación, congestión y todo lo que conlleva la grave erosión de la calidad de la propia vida urbana.

Mecanismos de reducción del ruido a través de techos y paredes vegetales

El desarrollo sostenible requiere la consideración de diferentes elementos que van totalmente relacionados entre ellos. A tener en cuenta sobretodo la reducción del consumo de energía y agua, la minimización de la contaminación, la proliferación en el uso de materiales ecológicos y en materia de movilidad el uso frecuente de transporte público que ha de ser mucho más eficiente.

De esta manera, el espacio verde urbano, incluido el enverdecimiento de los edificios que involucran tanto techos verdes como paredes verdes, es solo una pieza importante de todo este conglomerado. Las ciudades modernas proporcionan enormes áreas de espacio para techos y paredes, en muchos casos que se extiende por encima de la calle.

A todo esto podemos desglosar de forma clara en tres modos como la vegetación puede influenciar de manera directa los decibelios de forma atenuada.

En primer lugar, el sonido puede dispersarse a través de elementos vegetales, como troncos, ramas y hojas. En segunda opción conocemos la absorción el sonido a través de la propia vegetación, provocando una disipación al convertir la energía del sonido en calor. También hay una contribución a la atenuación por los efectos de la capa límite termo viscosa en las superficies de vegetación. Por último, con la presencia de suelo se puede conducir a una interferencia destructiva entre la contribución directa de la fuente al receptor y una contribución reflejada en el suelo.

De este modo, la vegetación en sí puede reducir los niveles de ruido en hasta 8 dB y ocasionalmente más. En cuanto a los efectos de aislamiento acústico de la vegetación cuando se incorpora en edificios, la contribución de los techos verdes al aislamiento acústico es más rendible que en las paredes vegetales. En la instalación de estas últimas en los edificios pueden abordarse mediante dos sistemas de construcción diferentes, las propias paredes verdes o fachadas verdes. Estas paredes vivas, básicamente se pueden diferenciar dos tipos principales. El primer tipo utiliza filtros de geotextil para sostener plantas sin sustrato, mientras que en la segunda tipología, el sustrato y las plantas se colocan en módulos, de plástico o metal, a veces pre-cultivados, que se fijan en vertical. estructura de soporte directamente al muro de la fachada del edificio.

Desde Plantikum te animamos a la instalación de estas paredes verdes dentro de tu edificio para poder beneficiarte de todos sus recursos ambientales y acústicos.